martes, 8 de marzo de 2011

Chosen: Capitulo 1/1

 Blanco…todo aquí es tan blanco, sin ningún color, sin vida. Muchos pensarían que el blanco implica pureza, pero no aquí, aquí solo muestra dolor y soledad.

Pienso sobre ello mientras la enfermera  hace su chequeo diario. Hace ya 3 meses que vivo la misma rutina, sin nada nuevo, sin nada que pueda motivarme. Siempre hay silencio aquí, excepto por los ocasionales gritos que muy rara vez se producen y siempre me pregunto porque gritan, que es lo que les causa tanto daño, tal vez gritar es su forma de desquitarse, tal vez les ayuda a recordar, pero eso seria imposible, porque aquí nadie recuerda….

La enfermera esta a punto de terminar, lo se porque como cada día inyecta en mi brazo ese liquido azul, no se que es, la primera vez que me inyectaron pregunte al doctor que era , dijo que no era nada por lo cual 
preocuparme, que eso me haría sentir bien, y así fue, en ese momento me había sentido cansada, pero luego que todo había terminado me sentía fuerte, enérgica, lo único malo en mi había sido ese vacio en mi interior, ese vacio que me acompaña cada día, como si algo muy importante faltara. Mis recuerdos, mi vida, eso faltaba.

--Muy bien cariño, creo que eso es todo—dice la enfermera mientras limpia la herida que el pinchazo a 
dejado.

Agarro su muñeca y la miro a los ojos, como siempre hago, aquí los ojos son lo único que tienen color, no, me equivoco, no son lo único, también esta el brazalete que adorna mi muñeca. La enfermera comienza a sentirse incomoda, retuerce sus dedos tratando de soltarse y desvía la mirada, como todos hacen siempre que los miro directamente, tal vez deben de temerme o algo así, pero solo conozco a una persona que a podido mantenerme la mirada sin titubear, y ese es el Director, la verdad no conozco su nombre, creo que nadie lo sabe o si lo hacen no lo usan, todos aquí lo llaman el Director, y de todos los dotados soy la única que ha hablado con el directamente.

La enfermera comienza a toser tratando de conseguir mi atención, nuevamente me eh dejado ir en mis pensamientos, suelto su muñeca y esta vez quien desvía la mirada soy yo.

--Gracias……gracias—digo levantándome de la camilla, e vuelto a olvidar su nombre, otra vez.

Ella abre su boca, seguramente para darme alguna indicación de que medicinas debo tomar, pero antes de que algún sonido se produzca salgo de la sala hacia el pasillo, el único lugar al que puedo ir por ahora es mi habitación que se encuentra al otro lado del edificio. Los guardias que se circulan los pasillos no nos permiten explorar ni hablar con otros discípulos, al menos a mí. Eh visto a otros hablar entre si, pero por alguna razón cada vez que intente acercarme los guardias me lo prohibieron, y a diferencia de otros mis clases son privadas, soy la única a la cual el Director atiende, y eso me asusta pero a la vez me hace sentir especial, única.

Recorro los pasillos arrastrando mis pies sin ver realmente el camino, mi bata golpea levemente mis piernas a cada movimiento, los guardias me saludan asintiendo en mi dirección, yo no respondo, los ignoro y sigo mi camino, en un momento choco contra un enfermera que salía de una habitación haciendo que esta caiga y junto con ella los utensilios que llevaba. Me arrodillo sobre el suelo para tratar de ayudarla, alcanzo una pinza cerca de mi pie y la tiendo hacia ella, invitándola a que la tome, lo cual hace bruscamente. Antes de que pueda replicar algo termina de juntar todo y huye del lugar prácticamente corriendo, y esta vez soy yo quien queda con las palabras en la boca.

Me levanto del suelo pasando mis manos por la falda de la bata para sacar cualquier suciedad, lo cual es imposible, ellos mantienen limpio cada rincón. Levanto mi mirada y me encuentro con una niña pequeña, que espía medio escondida la escena, su cuerpo esta dentro de la habitación de la cual la enfermera salió, solo veo su pequeña cabeza, la cual esta repleta de pequeños rizos dorados, su pequeña boquita esta abierta formando una perfecta O y sus ojos, de un azul intenso, muestran miedo y su tobillo esta adornado por una cinta azul. Extiendo mi mano para tocarla, tratar de calmarla, porque se como se siente, así me sentí  yo en algún momento, pero ella se aleja, dejo caer mi mano. No puedo saber con exactitud si es nuevo o no, jamás presto demasiada atención a los nuevos aunque cada mes alguien nuevo llega.

--No temas...no te hare daño—digo tratando de ser dulce.

Ella parece dudar, pero luego de un momento sale de la habitación, aun así se mantiene a una distancia 
prudente de mí.

--Como te llamas?—pregunto.

Se que no debería de hacer esto, de hablar con otros, pero no puedo evitarlo, esta niña me recuerda a mi 
cuando llegue. Se que debo darme prisa antes de que un oficial llegue y me escolte hasta mi habitación, al 
encierro.

Ella parpadea varias veces confundida, como si no creyese que esto esta sucediendo, pero al segundo se 
recompone.

--Megan—responde tímidamente.

Veo que ella no va a huir corriendo de mí, por lo cual me acero y me arrodillo frente a ella, hasta que estoy a 
su altura, el estudio, maravillada por el color de sus ojos.

--Cuantos años tienes Megan?

--Tengo 6  años—ella sonríe, como si tener  6 fuese lo mejor del mundo y para ella seguramente lo es.

Estoy asombrada, ellos jamás traen a discípulos tan pequeños, normalmente los dones se manifiestan a partir 
de los 13 años o en mi caso por un accidente, ella debe de ser un caso especial.

Aturdida toco inconscientemente mi cicatriz, ubicada en mi frente, el único indicio de una vida pasada.

Vuelvo mi atención a ella y la pillo mirando fijamente mi brazalete, seguramente aun no le han explicado el 
porque de los brazaletes.

--Te preguntas porque el mío es rojo no?—pregunto mientras coloco mi cabello en su lugar, de modo que 
cubra la cicatriz.

Ella asiente silenciosa, confundida, asustada. Comienzo mi explicación, sin ocultarle nada, por mas aterrador 
que fuese.

--Todos los discípulos llevamos estos brazaletes o tobilleras para diferenciarnos, el tuyo es azul, eso significa 
que tu don es intermedio, no es peligroso pero tampoco inocente.

--Mi.don?

--Si, tu don…seguramente aun no lo has descubierto, pero lo harás, pronto, ellos te ayudaran.

Megan pone su pequeño dedo sobre sus labios, pensando, a decir verdad eso es realmente adorable, en este 
momento casi parece una adulta. Sin poder evitarlo una pequeña risilla sale de mi boca, y por un momento en 
mucho tiempo siento algo, algo llamado felicidad.

 --A veces tengo sueños extraño—una sonrisa se extiende por su rostro—Anoche soñé que una enfermera se tropezaba con otra persona, tal y como hace un momento sucedió.

--Puedes ver el futuro, eso es genial—sonrió junto con ella, su sonrisa es de esas que contagian y que a pesar de que uno este triste o enfadado no puedes evitar sonreír.

Entonces su rostro cambia, su sonrisa se desvanece y esta vez parece preocupada.

--Si el azul significa intermedio, entonces….

Se lo que va a decir, lo supe desde el momento en que su mirada cambio, ella acaba de descubrirlo.
Miro fijamente mi brazalete que brilla de un color rojo carmesí, lo que me califica como una discípula peligrosa, o al menos mi don lo es.

Ella se aleja de mi, su cara esta pálida, tropieza con sus propios pies y cae al suelo, sus ojos se llenan de 
lágrimas.

--Jamás te haría daño Megan, no tienes porque temer, yo no…

Solo entonces me doy cuenta, sus labios están azules y su cuerpo comienza a convulsionar.  Ella esta rechazando el cambio. Lo eh visto antes, muchas veces suceden, los doctores no saben porque es,  solo muy pocos han logrado sobrevivir, la mayoría no lo hace.

Se lo que sucederá, su cuerpo seguirá convulsionando hasta que su corazón no pueda aguantar mas, y luego todo terminara, sus ojos, su cuerpo, sin vida.

No puedo dejar que eso suceda.

Sin titubear me arrodillo junto a ella mientras a gritos pido ayuda. La tomo sostengo en mis brazos, pongo su cabeza en mi regazo y lloro, por primera vez en mucho tiempo lloro. Las lágrimas resbalan por mi rostro y caen sobre el suyo. Trato de calmarla, darle palabras de aliento pero no puedo, no se que hacer. Oigo gritos detrás de mí, giro mi rostro y veo personas corriendo hacia mí, la mitad de los discípulos han salido de sus habitaciones,  seguramente alertados por mis gritos. Los guardias tratan de contenerlos, ordenándoles que vuelvan a sus habitaciones, todos lo hacen.

Los médicos llegan hasta donde estoy, y antes de que pueda decir algo unos fuertes brazos me toman por la 
cintura, me alzan y me alejan de allí.

Comienzo a gritar y patalear, tratando de zafarme del agarre del guardia, pero el rápidamente me coloca sobre su hombro y me lleva a mi habitación.

Araño con mis uñas la espalda del guardia pero el no hace caso, en su lugar el agarre se vuelve mas fuerte, entonces se me ocurre un idea, con mi pierna doy un golpe a su ingle, el guardia al instante me suelta lo cual me da la oportunidad de huir. Corro con todas mis fuerzas, tratando de llegar a Megan, pero es difícil, el guardia me ha llevado más cerca de mi habitación pero muy lejos de Megan.

Doblo la esquina en un pasillo y me detengo, entonces lo veo, a la distancia lo médicos la rodean tratando de salvarla. Estoy a punto de retomar la marcha cuando algún duro cae sobre mi arrojándome sobre mi estomago al suelo, se que es el guardia porque esta vez me mantiene boca abajo y con sus rodillas aplasta las mías. Araño el suelo, como si ello pudiese ayudarme, estoy a punto de golpear al guardia con las manos cuando un agudo sonido llena la sala.

Es ese pitido, ese al cual temo tanto, el cual indica que su corazón se ha detenido. Megan ah muerto.

El guardia me levanta del suelo y me carga sobre su hombro nuevamente. Esta vez no lucho, no hay nada por 
lo cual hacerlo, ya todo termino. Al girar a la esquina levanto mi rostro y veo como los doctores cubren su 
cuerpo con una manta, la única que siente tristeza en este momento soy yo, para ellos es solo un desperdicio, un don perdido.

Al llegar a mi habitación el guardia me arroja bruscamente sobre mi cama y sale de la habitación cerrando la 
puerta con llave.

Me siento sobre la cama y miro al vacio, nada de tiene sentido pero a la vez todo lo tiene, siento tristeza, culpa y por un momento algo nuevo me inunda…rabia.

De un salto salgo de la cama, tomo lo más cercano, una silla, y la arrojo contra la pared, lo mismo hago con un cuaderno, un cepillo, y muchas cosas más. Doy patadas con todas mis fuerzas al armario, abollando las puertas de este.

Se que las cámaras que siempre vigilan están mirando todo, pronto enviaran a alguien para calmarme, pero no me importa porque en este momento siento mucha rabia.

Rabia contra los doctores que no pudieron salvarla, rabia contra el guardia que me alejo de ella, rabia contra 
Megan...por no haber sido lo suficientemente fuerte como para resistir. Rabia contra mi misma.

Estrello mi mano contra el espejo y este se rompe en mil pedazos que caen al suelo. Mi mano sangra, duele, pequeñas gotas caen al suelo manchándolo, el único color en esta habitación.

Oigo pasos en el pasillo, ellos vienen a detenerme, antes que me haga mas daño. Arrojo el escritorio contra la puerta, bloqueándola. Ellos tratan de entrar, primero quitan el cerrojo pero luego se dan cuenta de que la puerta esta bloqueada, por lo cual deciden usar la fuerza bruta. Los golpes comienzan, el escritorio se mueve centímetros con cada golpe, en unos minutos ellos estarán dentro. Asustada me hecho hacia atrás, miro hacia todas partes, tratando de encontrar algo mas para bloquear la puerta, esta el armario, pero es demasiado pesado para moverlo, entonces algo llama mi atención. Es el espejo, solo algunos pedazos han quedado unidos, y en ellos esta mi reflejo.

Mis mejillas están de un vivido color rojo, mi cabello esta alborotado y mis ojos de un color chocolate me asustan, en este momento no muestran miedo o añoranza, sino locura y me doy cuenta, ellos no están tratando de salvar mi vida, ellos están tratando de preservar mi don.

Asombrada me alejo de la imagen y algo cruje bajo mis pies, es un vidrio, lo recojo y lo aprieto en mi mano sana, este atraviesa la piel, es lo suficientemente filoso como para hacerlo y eso me da una idea. Lo acerco a mi muñeca.

Mi vida no vale nada pienso, la vida de Megan no valía tampoco, ninguna vida en este lugar lo vale.

Estoy a punto de cortar cuando la puerta se abre abruptamente enviando al escritorio al otro lado de la 
habitación.

El guardia entra hecho una furia, sus ojos se abren de par en par cuando se fijan en mi, miro mi mano que sostiene el arma, el titubea, dudando sobre que hacer, tengo mi oportunidad, mi momento de acabar con todo, pero dudo demasiado. Cuando me doy cuenta el guardia se recupera, corre hacia mi y aprieta mi muñeca, lastimándome, mi mano se ante el dolor y el arma cae, el me arroja sobre la cama y con sus manos sostiene mis muñecas a cada lado de mi cuerpo, comienzo a patalear, pero otro se acerca rápidamente y sostiene mis piernas. Una enfermera se acerca y antes de que pueda siquiera gritar siento como la fría aguja a traviesa mi piel. El líquido se esparce por mis venas y el cansancio comienza a recorrerme.

Sedantes…ellos me han sedado. Mi cuerpo comienza a sentirse demasiado pesado y dejo de luchar, trato de mantenerme consiente pero me es imposible, mi vista comienza a fallar y todo se vuelve borroso, la obscuridad comienza a absorberme, cierro mis ojos por un momento, siento como las manos que me sujetaban se alejan, oigo pasos, susurros y luego silencio.

Abro mis ojos por un momento y me sorprendo, la puerta de mi habitación esta abierta y allí hay un muchacho, el me mira fijamente, es hermoso, y aunque mi vista es borrosa veo que sus ojos son azules, como los de Megan.

Dejo a una sonrisa extenderse por mi rostro y con esa bella imagen me dejo ir, teniendo en mi mente esos ojos azules.

Continuara.....
-----------------------------------------------------------------------------------
Hola!!!!bueno...por fin no? la primera parte del primer capitulo de Chosen!!!!Espero de veras que os guste, como veran ya en el primer capitulo hay algo de accion, y es porque esta historia esta repleta de ella!!por supuesto tambien tendra sus partes romantica <3 como cualquier historia... en fin..espero que os guste y por favor...comenten mucho!!!jajaja XD. La segunda parte del cap. la publicare el viernes por la noche.
Cuidense!! Bye...

PD: Si pudieran hablarle a sus amigas de mi blog os agradeceria mucho, muchisimo!!


12 comentarios:

  1. Esto es mucho mas qe Excelente ! esto es Asombroso , escribe muy , Pero Muuy Biien :D


    Me a encantado el capitulo , se ve qe la historia sera Prometedora ! Y me a enamorado el personaje .


    Publica pronto

    Nos leemos

    Bye

    XoXo
    Rosebelle ^^

    ResponderEliminar
  2. Esto es Asombroso me encanta como escribis y la historia es alusinante, el primer cap me dojo impactada.
    Espero publiques pronto,que andes bien, besos

    ResponderEliminar
  3. Me gusta mucho, de verdad es muy bueno el primer capitulo, interesante e inovador. :]Avisame cuando tengas el segundo si? te sigo. Bye

    ResponderEliminar
  4. waaaaaaaaaaaaawwwwwwwwwwwwwww!!!! wwwwwwwwwwaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaawwwwwwwwwwww!!!!Wao... es... Perfecto?

    Waaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaawww.

    La historia se ve tan interesante y original, que.... waaaaaaaaaaaaaaaaawww. Me has enamorado, y eso, que es solo el primer cap!!!

    cuando publiques el next cap, me avisas, si?

    bueno, nos vemos, y sigue escribiendo tan maravillosamente.

    TKM. ♥♥♥

    ResponderEliminar
  5. simplemente fabuloso. espero subas muy muy rápido el 2do capitulo ya yo te sigo! tienes una fiel visitante !

    ResponderEliminar
  6. Que grosoooo! Quiero leer el capitulo dos :D

    ResponderEliminar
  7. Wao, eso fue genial!! Estoy ansiosa por leer el proximo... No solo me gustaron las escenas, sino tambien como lo escribiste, atrapante!!
    Por favor, avisame cuando cuelgues la continuacion, me encantó tu blog!!

    http://anaesthesiamortal.blogspot.com

    ResponderEliminar
  8. o.O DIOS! el capitulo me dejó impactada. es una de las primeras historias que me enganchan con el primer capitulo...!!
    estoy impaciente por el 2º capitulo, de veras. Tengo ganas de saber kien es ese chico xD
    pobre Megan... :$ tan solo tenía 6 añitos... T__T
    muy bueno, el cap.
    PD: pasat por mi blog si te apetece
    bss

    ResponderEliminar
  9. Woooooow! Geeeeenial! Ya quiero leer la parte dos, date prisa!!! Oh, qué tristeza lo de Megan :( Y la pelea esa con el guardia en el pasillo, WHOA, pensé que volaría sangre jaja! Qué intriga por saber quién es ese misterioso muchacho del final!
    En fin, me gustó mucho la manera en la que escribes!
    Te sigo y te afilio.... haces lo mismo? :D

    ResponderEliminar
  10. hola!! decir k me hago seguidora al momento!! y k te agregue al mail jaja me encanto la historia !!!! engancha con la primera frase!! k intriga lo del muchacho!! aunk creo k tardaras en decirnos kkien es eh?? jajaja me encanto!!

    http://lighting-susurrosenlanoche.blogspot.com/
    este es mi blog acabo de empezar una novela y te invito a que la leas, tu opinion me encantaria!! sigo leyendo guapa!!

    ResponderEliminar
  11. y dale! me quede esperado mas. . .

    ResponderEliminar
  12. Esta historia me encanta, describes las cosas extremadamente genial.
    Sigo leyendo vale?? ^^

    ResponderEliminar